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Kellogg suma a su programa Orígenes a los arroceros del Delta del Ebro y La Albufera de Valencia. Un proyecto para impulsar una agricultura más sostenible y que se exporta a 23 países.
Los agricultores arroceros del Delta del Ebro y La Albufera de Valencia se suman al programa europeo ´Orígenes´ de Kellogg, para introducir técnicas de agricultura más sostenibles para el cultivo del arroz que se exporta a 23 países en forma de cereales para el desayuno. Este programa, que se inició en España hace tres años, ofrece a los agricultores apoyo a través del conocimiento de expertos procedentes del Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentaria (IRTA) y el Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA). Con ello se pretende mejorar las prácticas agrícolas en términos de sostenibilidad para conservar los recursos naturales y garantizar un abastecimiento responsable de arroz.
Así, por ejemplo, se han introducido cambios en la racionalización del abono, condicionada ahora por el análisis del suelo que hacen los investigadores y que determina la cantidad exacta que hay que suministrar. A esto se suma un uso más racional del agua y la utilización de murciélagos para controlar las plagas, explica el gerente de la Denominación de Origen del Arroz de Valencia, Santos Ruiz.
Lo que se ha hecho es "fundir la experiencia de años de los agricultores, con la experiencia de técnicas de los ingenieros agrícolas", matiza Salvador Segarra, uno de los agricultores beneficiarios de este programa de agricultura sostenible. Por otro lado, este programa persigue mantener viva la agricultura arrocera en España, de especial importancia para el ecosistema del Delta del Ebro y La Albufera, ya que muchas aves encuentran refugio en estas plantaciones que caracterizan el paisaje.
